Pasto, una ciudad con profundas raíces indígenas y una rica historia colonial, se construye en el Valle de Atriz, en el corazón del departamento de Nariño, Colombia. Su nombre, proveniente de la lengua indígena, evoca significados de celebración y comunidad, reflejando el espíritu de sus habitantes.
Orígenes Precolombinos:
- Los Quillacingas:
- Antes de la llegada de los españoles, el valle era hogar de los Quillacingas, conocidos como los «Señores de la Luna».
- Este pueblo indígena se destacó por sus habilidades en la agricultura y la alfarería, dejando un legado cultural que perdura hasta hoy.
- Significado del Nombre:
- La palabra «Pasto» tiene raíces indígenas y se interpreta como «lugar de la fiesta» o «tierra de la parentela».
- Este nombre refleja la importancia de la comunidad y la celebración en la cultura local.
Fundación y Desarrollo Colonial:
- Villa de Pasto:
- Hacia 1537, surge la Villa de Pasto, marcando el inicio de la entidad urbana y civil.
- Este evento representa el encuentro de dos mundos y el inicio de una nueva etapa en la historia de la región.
- Ciudad de San Juan de Pasto:
- En 1559, la Villa se transforma en la Ciudad de San Juan de Pasto, adquiriendo mayor relevancia y estructura.
- El nombre honra a San Juan Bautista, el santo patrón de la ciudad, cuya influencia se mantiene hasta la actualidad.
- Celebración del Onomástico:
- Cada 24 de junio, Pasto celebra su onomástico, conmemorando la fundación de la ciudad y honrando a su santo patrono.
- Esta fecha es un símbolo de identidad y tradición para los habitantes de Pasto, quienes celebran con fervor y alegría.
Legado Cultural:
Pasto es una ciudad donde el pasado y el presente se entrelazan, creando una identidad única y vibrante. Sus raíces indígenas, su historia colonial y sus tradiciones vivas hacen de Pasto un lugar especial, donde la celebración y la comunidad son valores fundamentales.